Desinfección por Ozono
Se trata de un gas que se genera de un modo natural en la atmósfera, como producto de diversas condiciones climáticas y ambientales, tales como los relámpagos o la radiación solar ultravioleta, los cuales transforman el oxígeno del aire en ozono, el cual tras un periodo corto de tiempo vuelve a convertirse en oxígeno.
Numerosas investigaciones científicas han demostrado que el ozono, aplicado en tiempos y concentraciones adecuados, presenta una potentísima acción bactericida, viricida, fungicida y desodorante, postulándose como el método más eficaz para alcanzar una desinfección a nivel de esterilización y una eliminación completa de olores sin modificar las condiciones ambientales del recinto.
¿Qué cualidades tiene el Ozono?
¿Qué ventajas tiene la Desinfección por Ozono?
Por todo lo detallado anteriormente, el ozono demuestra ser, con creces, el sistema más efectivo para llevar a cabo la higienización y desodorización de ambientes y superficies, estas son algunas de sus principales ventajas:
¿En qué lugares se puede aplicar la desinfección por Ozono?
Los campos de aplicación del ozono son innumerables ya que su empleo está indicado en todos aquellos lugares en los que se pretenda conseguir un ambiente libre de contaminantes químicos o biológicos y olores desagradables, pudiéndose garantizar incluso, niveles de asepsia.
Estos son algunos de los lugares donde más se demanda la Desinfección por Ozono:
El Ozono y el Coronavirus
Se puede decir que el ozono no tiene límites en el número y especies de microorganismos que puede eliminar, dado que actúa sobre estos a varios niveles.
La oxidación directa de la pared celular constituye su principal modo de acción. Esta oxidación provoca la rotura de dicha pared, propiciando así que los constituyentes celulares salgan al exterior de la célula. Asimismo, la producción de radicales hidroxilos como consecuencia de la desintegración del ozono en el agua provoca un efecto similar al expuesto.
Los daños producidos sobre los microorganismos no se limitan a la oxidación de su pared: el ozono también causa daños a los constituyentes de los ácidos nucleicos (ADN y ARN), provocando la ruptura de enlaces carbononitrógeno, lo que da lugar a una despolimerización, de especial interés en el caso de desactivación de todo tipo de virus. Los microorganismos, por tanto, no son capaces de desarrollar inmunidad al ozono como hacen frente a otros compuestos.
El ozono es eficaz, pues, en la eliminación de bacterias, virus, protozoos, nemátodos, hongos, agregados celulares, esporas y quistes (Rice, 1984; Owens, 2000; Lezcano, 1999).
Por otra parte, actúa a menor concentración y con menor tiempo de contacto que otros desinfectantes como el cloro, dióxido de cloro y monocloraminas.
Además, el ozono, como indicábamos previamente, oxida sustancias citoplasmáticas, mientras que el cloro únicamente produce una destrucción de centros vitales de la célula, que en ocasiones no llega a ser efectiva por lo que los microorganismos logran recuperarse (Bitton, 1994).
El amplio espectro de acción del ozono como desinfectante resulta de especial relevancia en el caso que nos ocupa, ya que los virus transmisores de enfermedades víricas más o menos graves pueden transferirse desde un hospedador humano a cualquier superficie, de donde no son eliminados con los tratamientos convencionales de desinfección. Hay que tener en cuenta que los virus, por su naturaleza, son muy lábiles fuera del hospedador y desactivarlos es más fácil que eliminar bacterias y hongos resistentes y sus esporas, cosa que logran los tratamientos con ozono sin dificultad.
El ozono es incuestionablemente útil para eliminar, entre otros muchos, incluso el virus del Ébola en aire. Está demostrado que el ozono es al menos diez veces más potente que el cloro como desinfectante. Como ya hemos señalado, y según la OMS, el ozono es el desinfectante más eficiente para todo tipo de microorganismos. Por lo tanto, el empleo de ozono, tanto en agua como en aire, para la desinfección de superficies resulta mucho más recomendable que el uso de otros desinfectantes actuales.